La publicación de datos laborales en Estados Unidos trajeron preocupación de una posible recesión en el país más rico del planeta. Solo se crearon 114 mil nuevos puestos de trabajo y el desempleo subió a 4,3% . Esto se comunicó el pasado viernes y afectó negativamente a las bolsas de todo el planeta.
El índice Nikkei 225 de la Bolsa de Tokio cayó un 12,4%, marcando la mayor caída en puntos de su historia en términos de puntos y la más importante desde el derrumbe de los mercados de 1987. Wall Street abre la sesión con caídas de hasta el 6%.
De la misma forma, los mercados bursátiles de Europa y Asia se desplomaron hoy lunes,en Londres, el índice FTSE 100 abrió con una caída del 2,3%, mientras que el Euronext 100 cayó un 3,5%.
La preocupación por una posible recesión en Estados Unidos se apoderó de los mercados financieros y provocó una salida precipitada de los activos de riesgo. No sólo futuros, bonos y acciones , también tubo un desplome el Bitcoin con una baja del 16% en un día que no sucedía desde noviembre de 2022.
En Europa, el índice de referencia Stoxx Europe 600 perdió un 2,2%
Los gigantes tecnológicos no son la excepción. Antes que abra el mercado las acciones de NVIDA bajan un 14% y los de Tesla un 8,8%. Las acciones de Apple por su parte retroceden un 7%, las de Amazon un 5,7%%, las de Meta un 5,4%, las de Google un 5,2% y las de Microsoft un 4%.
Monedas de refugio como el franco suizo se dispararon frente al dolar, desatando especulaciones de que algunos inversores estaban deshaciéndose de operaciones rentables de “carry trade”* para obtener liquidez para cubrir pérdidas en otros lugares.
Warren Buffett siempre aconseja mirar al largo plazo y no apurarse a vender, en este caso vendió la mitad de sus acciones en Apple. Es un dato que también preocupa.
* Pedir prestado una divisa con un tipo de interés bajo mientras se compra otra divisa con un tipo de interés más alto.
Felipe Caorsi
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